Capitulo 2 parte I : extasis.

Sus ojos se le estremecian por debajo del polvo blanco, su mundo, giraba y lo golpeaba, y no paraba de llamarlo hacia aquel precipicio, que el borde de aquel destinaba a la locura y la felicidad de saber que por un momento, estaba en el cielo y no existiera nada ni nadie, que pudieran bajarlo de allí. Invento mil idiomas y sonidos, hombres con los cual trabajaba y daba rienda suelta a tantas horas en el taller de teatro, del cual había pensado que nada había aprendido. De obras de difuntos y cuentos fantásticos les replico a todos, de niños volando por tierras de nombres raros y no querían crecer, hasta una mujer con corona que perdía su zapato, sea por entupida, o por ingenua. El sol le quemaba, pero no tanto como el tequila que provocaba una llamarada en su cuerpo como si realmente pudiera lanzar fuego por él , y gracias a aquello, poder hacer volver a la vida a John Travolta en fiebre de sábado por la noche. En el comienzo del día tal vez nunca soñó con este momento, o lo espero, pero así como ocurren las cosas, llego, sin avisar, sin que puedas contemplarlo o pensar la manera en la que debería actuar, como en la muerte de un ser querido, el saber de un nuevo hijo, o cualquier otro hecho que pueda hacer temblar nuestro mundo.
Abrió un ojo y miro un almohadón de seda, logro levantarse aunque todavía no pudiera ver claramente por la movilidad que tenia el mundo en él. . Del otro lado de la cama, no había nadie, ni fotos ni nada que pueda hacerle recordar con quien habría pasado esta noche tan fuera de sí, que ni siquiera pudiera acordarse las ultimas 8 horas ni lo que había ocurrido en ellas.