viernes, 27 de febrero de 2009

Leon parte XXIV : fantaseaba canciones en la radio.

Y miro por mi ventana, por mi balcón, el reflejo de las luces de la ciudad. Una brisa cálida de verano y alguna radio equivocada que hace recordarte. En la oscuridad, me pierdo frente a la estación que hace que logre escuchar tu voz otra vez. Un cigarro podrá calmar mi sed, mi ansiedad, pensé, erróneo. Vive en mi mente el recuerdo, de cuando fuimos uno. Cuando contuviste mi miedo, mi frío y me cubriste con tus alas. Cuando amarré con tus besos tu cintura, como puedo a través de tus ojos ver adentro tuyo. En la forma que cae tu cabello sobre tus hombros, en que tu perfume ya es parte de mi, en que compartimos el mismo aliento. Tus ojos brillaban, los mios también, ambos se veían reflejados."Quedate conmigo, mi vida no es mía si no estás en ella". Y tus alas cayeron sobre el piso. Ahora eres mortal y puedes estar conmigo y sin ninguna respuesta, sin más que silencio, ellos decidieron hablarse, expresarse, al sentirse tan cerca uno del otro. Su conexión parecía ficción, parecía de épocas de dragones y castillos, de amores bajo la lluvia que se juraban amor eterno. Y así conversaron sobre las noches largas, las canciones que escribió para ella, los días largos e historias de tormentas. Todo esto en un solo y cálido beso. Y así, eran dos radios unidas que no pararon de transmitirse toda la noche.

jueves, 19 de febrero de 2009

Me voy y quizás no regrese.

a mis dos lados, oscuridad. Siento mis pies doler, como que estoy sobre un camino de piedras, donde empezar el recorrido, siento como duele. No hay sol, no hay arcoiris ni lluvia. No hay luz, sonrisas ni pucheros. Solo se siente frio, mucho viento, y un solo camino. Sin abrigo más que yo mismo, sigo mi ruta. Sin ver a mi alrededor, siento miedo, como si algo, o alguien, me persiguiera. Derrepente, pierdo la noción de lo poco que veia, el mundo se me tambalea y caigo. Despierto, me duelen los ojos y sufró, veo agua de las nubes caer por mi mejilla. No hay cielo, no hay estrellas para perderme dentro de ellas, no hay cartel de aproximación de finalizar este infierno. Más que yo contra todo lo que me rodea, solo, sin más que mi aliento, ya que mi sombra me traiciono. No escuchó las voces que me guiaban, las palmadas en la espalda, o un beso al mi regresar. Me pierdo y me descompongo, pero sigo en pie. Suspiro, veo el aire frio que sale por mi boca y se pierde por toda esta niebla. Miedo, más que tenerlo, lo siento. El olor a fracaso, tristeza, no logra disimularse por todo este lugar. Las piernas, el pecho, la cabeza, duele todo al seguir caminando hacia, quien sabe, ningun lugar. Valdrá la pena todo esto?

miércoles, 18 de febrero de 2009

Leon parte XXIV : Diurno en días calidos.

El espejo ya no me reconoce. Tengo los ojos grises, el pelo dorado, y la cara hinchada. Muevo la boca para comparar si ese -otro- soy yo. No hay manera. Apoyada mi cabeza contra la pared pienso en todo el mal que eh echo, y ahora me encuentro solo, y sin ninguna respuesta, sin ningún consuelo. Ni el espejo logra reconocerme, encontrar un poco de algo, de la persona que fui alguna vez, del hombre que fui.
Miro por la ventana, un día soleado, un rocío triste, cubre toda la ciudad. A pasado más de un mes desde que no te vi, las funciones terminaron y no te vi en el teatro, te vi perdida en canales de mediodía y mediaticos, donde desvelaban tus derroches, en cuales me has olvidado. Se hizo tarde, veo al pasar por una esquina, un pequeño bar, donde debajo se encuentra un teatro, causalidad o casualidad?. Echo un vistazo y veo a la obra: " Diurno en días cálidos ", se llama la obra.
A un costado decido sentarme, así puedo escuchar atento, a nuestro joven actor..

-:"Cada noche es una puñalada, cada madrugada, un atardecer para mi piel de vampiro. Eh perdido la sed, el apetito por mis victimas. No tengo miedo que me capturen o pidan fuego a mi cabeza. Los días, semanas y años pasan igual, a que los pétalos que caen de una rosa. La gente puede cambiar, su sangre no, su corazón no.
No sueño con un castillo en una montaña. Lo único que espero y ansio, en esta vida es que vuelvas conmigo. que vuelva a sentir elevado mi ritmo cardiaco, en que vuelva a creer que aun piensas en mi ."

miércoles, 11 de febrero de 2009

Y duele, duele verte pasar y que no me mires. Que se te pierda la vista en otro lado, en otros ojos. Duele que no existo, duele la indiferencia. Duele que me ignores. Soy, un poco más que un fantasma, ya que siento y soy mortal. Ver pasar los amigos, los autos, los amores, como alguien más. Ahora, que ya no mueres por este corazón frio, se congela para no abrirse más. No hay palabras que puedan hablar para una respuesta que, sinceramente, no existe. Te echo de menos, las noches en las estrellas y los sueños con algodon de azucar, pero son más que abismos y kilometros los que nos separán, aunque estes tan, tan cerca, que pueda sentir tu respiración.
Sentir, lo que uno siente al sentir al amor cerca: El dolor en el pecho, los nervios, tartamudear, reirse a la par con solo una mirada.. y no poder hacer nada, carajo, soy un fantasma. Ver esos ojos que una vez me vi reflejado, mirar a otra persona. Sentir ese aroma, tan particular, tan dulce, que siempre la rodeaba. Dude que era un campo de fuerza, o algo para atraer a las fieras (a mi lo hizo). Y así, como puedo mirarte, puedo observarte, vi que no soy más que un viejo suspiro, algo que no fue, que murio como un arbol en invierno, aunque renació en primavera, y florecio en verano. Tristes las coincidencias que me hacen pensar que, fuimos eternos. Crees en los amores a primera vista? Acaso, existen otros?..


ATTE: Alan Mauricio Schenone.

lunes, 9 de febrero de 2009

Leon parte XXIII : El juego, tu fiel traidor.

Ya lo se, aposte al 8 y perdi, era un numero menos. Soy malo en las apuestas, pero peor en el amor. Malo el dicho, echa la trampa. Soñe en estar acostado en algo con dos, tres o cuatro ruedas mirando las estrellas pero contigo a mi lado. Ingenuo. Tarde en recordar que desde el sueño a la realidad, hay un estrecho puente, que casi nunca acaba. Quise creer en mi, en ti, en nosotros, el sol me quito el sueño. Y ahora, sin más ni menos, estoy acostado sobre algo con dos, tres o cuatro ruedas mirando las estrellas, pero sin ti.

Leon parte XXII : El drama y la comedia.

Eran pasada la una de la madrugada, luego de que allá finalizado la función. Sentado, espero a la salida del teatro donde actúas, el diario te mostraba tan bella como siempre. Tu reflejo alumbraba y deslumbraba a cada uno de los espectadores que se situaban en el teatro y se rendían asombrados hacia ti, pensé que, no era el único. Desde el ultimo hasta el primero se pararon para rendirse, aplaudir y mostrar su agradecimiento, que pudieron ver, enfrente de ellas, una estrella fugaz sobre todo el firmamento. Afuera, después de una hora, fantaseo y espero verte.
Una puerta se abre. Una voz, dura y cansada me mira y pronuncia : "A quien espera?"
"A ella", respondo mostrando el diario. Y sin mas que una brisa de viento, me dice que ya se fue. Y así, en un instante, la respiracion se me corta, como el rocío,cae y baja sobre mi, la tristeza, la defraudacion, el pensar que tal vez, otra vez me equivoque..