viernes, 24 de mayo de 2013

Señores y amigos, compañeros de tartulias y domingos del 85 por la mañana. Más bien tarde que temprano, llevaremos el hielo del tiempo a la templanza del hogar, recobijandonos bajo las telas húmedas de los planes sociales, el desempleo mientras que cada tarde del domingo, espero llegar con otras noticias bajo el brazo. Despierta, sueña y no te canses de luchar. Bajo ningún aspecto de nuestra historia, de la historia de la humanidad, del potencial del ser humano, quedarse atorado en la puerta resolvió nada. Ni en aquellas fábricas teñidas de sangre obrera en el mayo francés ni los más avergonzados de España en este nuevo siglo. Lucha, muere, padece, revive, que así son más sagradas las victorias, y menos dolorosas las derrotas. Se dice que para elevar el nivel, el caudal de un triunfo, es necesario sobrevalorar al oponente para justificar la inmensidad de la victoria.

Despierta.