Desde la mañana que no creo en lo que creo
al verte pasar por los jardines de Marte
no creo en lo que veo en que estuviste ahi
ahi para mi para tí para nosotros
Pochoclos en la cama y masajes dulces
con Reynolds de testigo en una de terror
y yo por encima de tu mejilla bajando en
por el interior de amityville
entre el cielo de tu sonrisa y el calor de tu mirada
me quedo en el infierno de tu ansiedad de tu deseo
Albert aceptaría la cirugia al ver como la pólvora
explota al vernos juntos como dinamita de ACME
como el fuser con la Norton, andando y andando
cantando a tu oido silbando bajito
no creas que no me olvide de tu piel
por ensima de tu ombligo tirando guiños
a las sabanas para que bailen por debajo
de la cama y prestando ropa
lo nuestro no esta prohibido por leyes
ni por textos puestos en una libreta
es así como nos gusta, que sea incorrecto
sexy al limite, al viento de la distancia
entre mi boca
y tu boca
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